La República, Colombia
Los conductores argentinos se enfrentan a largas colas en los surtidores y a gasolineras cerradas, mientras la escasez de dólares del Gobierno deja varados en el mar a los barcos que esperan para importar combustible.
Escenas que recuerdan a las de Venezuela en los últimos años han aparecido recientemente en Argentina, con automóviles que dan vuelta a la manzana intentando cargar combustible en las estaciones. Jorge Ferro, un consultor de 42 años de Buenos Aires, intentó llenar el tanque en una gasolinera Axion en el acomodado barrio de Recoleta, pero los empleados le dijeron que no tenían “súper” y que solo podían ofrecerle 4.000 pesos (US$11) de gasolina premium.