Sin embargo, el mensaje de una porción significativa del electorado, que se decantó por figuras radicalizadas, no puede ser ignorado: el país necesita, además de un sistema financiero robusto de un Banco Central y de un Ministerio de Hacienda despolitizado, para encarar la tarea de promover un Poder Judicial independiente.
El desafuero del diputado Erico Galeano, vinculado por el Ministerio Público con la operación de lavado de dinero del narcotráfico internacional desmantelada por “A Ultranza”, fue una oportunidad aprovechada por Peña para sentar postura contra la impunidad. Que la Justicia Electoral haya adelantado su calendario y lo haya proclamado senador, el mismo día en que Diputados removió sus fueros, puede poner en duda la buena voluntad política para que el acusado resuelva sus cuentas pendientes con la Justicia.
Los resultados de las últimas elecciones generales, sobre todo la tracción popular de figuras autoritarias radicales, evidencia la urgencia de que el Estado encare el fortalecimiento de las instituciones que tienen delicadas e importantes funciones sociales.