El poder ver el talento antes de que otros lo vean, detectar el potencial humano y encontrar no solo al mejor empleado para cada rol, sino también el mejor rol para cada empleado, es crucial para dirigir un equipo de primera. Así lo describe claramente Jim Collins en su libro Good to Great, la persona adecuada en el lugar adecuado dentro del bus.
Ser un fenomenal agente de talentos no es fácil. Demasiados de nosotros buscamos talento en los mismos lugares (equivocados) de siempre, o seguimos la tendencia popular de pensar que la “mejor contratación” es la “mejor cultura”. Estos enfoques socavan los poderes para impulsar la diversidad (demográfica y cognitivamente) y, en última instancia, obstaculizan la creatividad y la innovación.
Si bien no existe la forma perfecta de contratar talento, existen mejores prácticas que aquellas en los que hemos confiado en el pasado. Después de examinar cuidadosamente el desempeño de lo que hace a un jefe competente e incompetente, los expertos han identificado algunas áreas clave, como ser: