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El grueso de la cosecha ya se encuentra muy avanzada en grandes proporciones, quedando poco remanente para finiquitar la campaña principal de soja 2022-2023, mientras las proyecciones empiezan a apuntar a un escenario positivo. Si bien, las últimas precipitaciones son beneficiosas para las siembras tardías, ya no impactarán en mayor medida en la definición de rendimiento general que se tenga al finalizar el periodo de recolección, con una estimación de cosecha de 8,5 millones de toneladas.

En conversación con la ingeniera María Luisa Ramírez, asistente en la Asesoría Agrícola de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco), mencionó a nuestro medio que el sector espera una buena campaña, no así una “súper producción” como se estimaba a inicios de la temporada. Sin embargo, el desarrollo de los cultivos y las primeras estimaciones arrojan buenos números en general, lo cual ayudará bastante al productor que sigue golpeado.