En un país donde las oportunidades suelen ir de la mano con desafíos estructurales, el Foro de Inversiones Unión Europea – Paraguay 2025 no fue simplemente un evento más en la nutrida agenda diplomática y económica. Fue una declaración de intenciones. Una hoja de ruta ambiciosa que pone a Paraguay en el radar estratégico de la inversión verde, la producción sostenible y la integración regional inteligente. En una coyuntura marcada por las exigencias de sostenibilidad, competitividad y resiliencia, el foro sirvió como catalizador para repensar el rumbo del desarrollo nacional.

NUEVA ECONOMÍA

La noticia que marcó un antes y un después fue el anuncio de la Unión Europea sobre el lanzamiento de una iniciativa global de bonos verdes. Este mecanismo apunta a canalizar capital privado europeo hacia proyectos con alto impacto ambiental y social en países socios. Paraguay, con una matriz energética limpia, una taxonomía ya formulada para inversiones sostenibles y un portafolio emergente de iniciativas forestales, aparece como candidato natural. Lo que se discute ahora es la compatibilidad técnica entre las normas paraguayas y los estándares europeos. Si se logra esa convergencia, se abriría una nueva autopista financiera para que emprendedores locales accedan al capital más exigente y sofisticado del mundo.

VISIÓN DE LARGO PLAZO

La intervención del viceministro de Economía y Planificación, Felipe González, aportó perspectiva a largo plazo. Paraguay está diseñando un Plan de Desarrollo a 30 años, orientado a identificar nuevos motores de crecimiento. Es un cambio cultural profundo: dejar de depender del azar de los precios internacionales o de la soja, para diseñar de forma deliberada qué sectores queremos hacer prosperar. En un contexto donde la región suele moverse al ritmo de la coyuntura, esta visión resulta audaz.

En esa línea, el rol de la Agencia Financiera de Desarrollo (AFD) es crucial. Con una trayectoria de más de 15 años en financiamiento del sector forestal y una nueva política para premiar proyectos sostenibles con tasas preferenciales, se posiciona como puente entre ideas transformadoras y recursos disponibles.

ELEMENTO CLAVE: LA ENERGÍA

El país cuenta con una ventaja estructural inusual: produce energía 100% limpia, pero apenas consume el 58% de lo generado. Ese excedente energético es un activo que puede atraer industrias, centros de datos, fábricas de hidrógeno verde y nuevas tecnologías que demandan energía barata y sostenible. A esto se suman proyectos de gran escala, como la construcción de pequeñas centrales hidroeléctricas —con 22 sitios identificados y una inversión potencial de US$ 1.400 millones—, además del inminente inicio de licitaciones para 40 megavatios de energía solar.

Un punto clave en esta estrategia es la nueva subestación que será construida en la localidad de Valenzuela. Esta infraestructura jugará un papel fundamental en la integración eléctrica regional, ya que permitirá mejorar el flujo de energía entre Paraguay, Argentina y Brasil. Gracias a nuevas líneas de transmisión asociadas, el sistema nacional podrá conectarse con mayor eficiencia a los mercados vecinos, y en el futuro incluso extenderse hasta Uruguay, consolidando a Paraguay como un eje estratégico en la interconexión energética sudamericana.

EL DESAFÍO LOGÍSTICO

Una de las barreras que limita el potencial de Paraguay es su infraestructura logística. El foro no evitó el tema: la navegabilidad permanente de la hidrovía Paraguay-Paraná fue planteada como una prioridad nacional, con propuestas de alianzas público-privadas para su mantenimiento mediante concesiones y peajes. La visión es clara: sin un corredor fluvial eficiente, los costos logísticos seguirán marginando a Paraguay de los mercados globales más exigentes.

El país necesita además una revolución en sus puertos y ferrocarriles. La posibilidad de conectar el puente San Roque González con el sistema ferroviario argentino —y así abrir una vía de salida directa hacia el Atlántico— es una idea potente. Asimismo, el Tren de Cercanías, que podría transformar la movilidad metropolitana de Asunción, está en etapa avanzada de diseño y estructuración financiera.

También se puso en foco la necesidad de modernizar la infraestructura portuaria con sistemas que garanticen trazabilidad. Esto no solo facilitaría el cumplimiento de estándares internacionales, sino que abriría las puertas a mercados de alimentos más exclusivos y exigentes del mundo.

ACTIVO ESTRATÉGICO

Uno de los puntos más contundentes fue el redescubrimiento del potencial forestal paraguayo. Según datos del INFONA, hay cinco millones de hectáreas aptas para el desarrollo de cultivos forestales, cinco veces más que la superficie actual del Uruguay, país líder regional en la materia. Este dato no pasó desapercibido por los inversores europeos, especialmente a la luz del caso Paracel, que con su inversión de US$ 3.500 millones está revolucionando el norte del país: 40.000 empleos proyectados, un aumento del 250% en la recaudación municipal y un ecosistema de proveedores, transporte y servicios que se reactiva en cascada.

PORTAFOLIO DE NEGOCIOS

El dato frío pero contundente: los proyectos presentados en el foro representan una cartera de iniciativas con necesidades de financiamiento por más de US$ 9.253 millones. Forestación, energía, logística, trazabilidad de alimentos, conectividad… todos con enfoque de sostenibilidad y con liderazgo de empresas ya establecidas en Paraguay o decididas a ingresar. Quince de estos proyectos —con tickets que van de US$ 10 a 4.000 millones— fueron protagonistas de la última jornada del evento, ante un público europeo atento y ávido de oportunidades en América Latina.

PLATAFORMA VIVA

El foro no fue un acto protocolar. Hubo más de 160 reuniones de matchmaking, otras 126 citas agendadas vía plataforma digital, 440 inscriptos virtuales y 350 asistentes diarios, entre ellos 88 extranjeros provenientes de 25 países. Participaron representantes de los sectores financiero, industrial, agrícola, logístico, así como embajadas, cámaras de comercio y organismos multilaterales. Fue una feria viva de ideas, capital y ambición compartida.

MENSAJE INTEGRADOR

Organizado bajo el paraguas de la estrategia Global Gateway de la Unión Europea —y con apoyo del MIC y Rediex— el Foro fue más que una vitrina de proyectos: fue un mensaje político y económico. Paraguay tiene estabilidad macroeconómica, reglas claras y técnicos capaces. Europa busca socios confiables, con visión ambiental y potencial de crecimiento. El punto de encuentro está cada vez más claro.

Este tipo de foros no garantizan inversiones inmediatas. Pero sí siembran confianza, construyen puentes y delinean oportunidades. Paraguay necesita precisamente eso: visión, articulación, infraestructura y liderazgo. Si logra sostener este impulso y ejecutar con inteligencia, el Foro Unión Europea – Paraguay 2025 habrá sido no solo un evento exitoso, sino el prólogo de una nueva era.

Nuevo capítulo en la alianza entre Paraguay y Europa

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