La directora del Fondo Monetario Internacional de prístino nombre, Kristalina Georgieva, se metió en un lindo berenjenal al recomendar a los estados europeos no abandonar a los sectores más vulnerables, socioeconómicamente hablando, aún vapuleados por los coletazos del COVID que no termina de irse y por el fenomenal embrollo de la guerra en Ucrania que todos sabemos cuándo empezó -el 24 de febrero de 2022- pero que nadie sabe cuándo terminará.
Editorial
Bailando en la cuerda floja
Esperar que los gobiernos sean prudentes con el gasto público con fines políticos equivaldría a que un alcohólico pida una gaseosa a un bartender.